1 solomillo de cerdo
1 lámina de masa de hojaldre
4 lonchas de jamón serrano
8 tranchetes de queso
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 180º. Limpiamos bien el solomillo de cerdo, quitandole toda la grasa posible. Con aceite bien caliente le damos una vuelta por la sartén para sellarle, para que luego no pierda el jugo al hacerlo al horno. Preparamos el envoltorio: extendemos la lámina de hojaldre y la cubrimos con las cuatro lonchas de jamón, ocupando toda la superficie que podamos. En la parte central y de un lado a otro, ponemos una fila de tranchetes de queso. Sobre ellos colocamos el solomillo de cerdo que ya hemos pasado por la sartén y le ponemos encima otra fila de tranchetes. Con mucho cuidado enrollamos con la masa y el jamón todo el solomillo con el queso, de manera que formemos un cilindro grueso cubierto entero por la masa de hojaldre bien cerrado. Para que quede más bonito, lo pintamos con huevo batido. Lo colocamos en una fuente amplia de horno para dar espacio al hojaldre, que cogerá volumen. Lo metemos al horno a media altura durante unos 45 minutos a 180º.
